Madre tierra.

Mi amor por ella, no tiene límites, encierro en mi pasado el aroma de los ancestros, cautiva es mi imaginación, alma en pena ronda por tus bosques, desahuciada de tus verdes valles, cautiva de tus raices, y lágrimas de rocío, despojo de lo que fuí, encarcelada en tus maltratos, heroína de tus azañas, por querer reconvertirte en lo que fuiste, añorando como revoloteaban ante mi, pienso en el pasado, para poder vivir con fuerzas el presente. (La madre Tierra).